La comisión técnica creada de cara a estudiar las actuaciones más urgentes para evitar nuevas inundaciones en la ciudad, ha dado a conocer las primeras intervenciones necesarias para mejorar sustancialmente la evacuación de las aguas pluviales en distintos puntos de la localidad.

Según los datos facilitados por los técnicos que forman parte de la comisión creada hace un año, las prioridades se centran, atendiendo a la capacidad económica del Ayuntamiento, en la mejora de la red de saneamiento, frente a las dos grandes intervenciones pendientes para evitar la entrada de agua desde las cuencas pluviales de la zona del Camino de Úbeda y La Paz cuyo desarrollo supone un importante desembolso económico.

De este modo, las actuaciones que comenzarán a realizarse a partir del próximo año, pues se pretende incluir una partida específica para ello en los presupuestos municipales del próximo año, se centrarán en acabar con los puntos negros que se mantienen en la zona centro, desde la calle Pontón a calle Jaén, así como pequeñas mejoras en Áurea Galindo y la barriada de los Andaluces. «Se trabajará en sustituir algunas tuberías por unas de mayor capacidad que eviten el colapso de la red en determinados puntos pues, en muchos casos, las conexiones se reducen a la mitad de capacidad «creando una barrera para la evacuación de las aguas», explica el concejal de Ordenación Territorial y Medio Ambiente, Joaquín Gómez Mena, quien puntualiza que en otros casos, como es la calle Jaén, se prevé crear nuevas conexiones que favorezcan la evacuación del agua antes de llegar a la zona centro.

Un problema similar al que se registra en la Plaza de Ramón y Cajal, donde vierten las aguas de la calle Pontón y la Plaza de San Francisco, entre otras. En este caso, el estudio técnico recoge el desarrollo «de una actuación de envergadura» como es el desvío de las aguas desde la calle Pontón a través de la calle Baños hasta el colector del arroyo Periquito Melchor.