La lluvia volvió a ser la protagonista del Viernes Santo en Linares y acabó desluciendo, también, las tres estaciones de penitencia que salieron esa tarde a las calles. La primera en hacerlo fue la Real Hermandad y Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de la Esperanza, que comenzó su desfile procesional a las tres de la tarde desde la Parroquia de San Francisco, aunque no pudo concluirlo en su totalidad por la situación de la meteorología.

Esta Hermandad volvió a demostrar, durante el tiempo que estuvo en las calles, la elegancia que la caracteriza. Sus dos Titulares, el Santísimo Cristo de la Expiración y la Virgen de la Esperanza, lucieron hermosos y fueron mecidos con suavidad y maestría por sus Hombres de Trono bajo los sones de la Banda de Cornetas y Tambores «Nuestra Señora del Rosario» y la Banda de Música «María Inmaculada», respectivamente.

Desde su Salida, el cortejo procesional pasó por las calles Isaac Peral, República Argentina, Espronceda, Viriato, Menéndez Pelayo, Sagunto y Teniente Ochoa, para dirigirse al punto más emblemático de esta Cofradía, la calle Marqués de Linares, donde se celebró la Ceremonia de la Expiración, uno de los momentos más solemnes y emotivos de la Semana Santa linarense, en el que Jesús, antes de morir, se encuentra con su Madre en el Gólgota.

Tras dicho acto, que volvió a congregar a gran cantidad de personas, la lluvia seguía haciendo acto de presencia en Linares con cierta intensidad, de ahí que la Hermandad decidiera finalizar su Estación de Penitencia en la tarde del Viernes Santo 2013. Mientras que el Trono del Santísimo Cristo de la Expiración regresó a la parroquia de San Francisco, efectuando su Entrada a las siete de la tarde, el de la Virgen de la Esperanza se dirigió a la cochera de la Casa de Hermandad, situada en la calle Tinte.

Texto: J.J.: García Solano
Fotos: Ivan Casasempere
Vídeo: Jordi Casasempere