Normalmente se trata de niños que presentan un retraso en la aparición o en el desarrollo de todos los niveles del lenguaje (fonológico, morfosintáctico, semántico y pragmático), que afecta sobre todo a la expresión y, en menor medida, a la comprensión, sin que esto se deba a un trastorno generalizado del desarrollo, ni a déficit auditivo o trastornos neurológicos.

La aparición del lenguaje y la expresión es más tardía de lo habitual, y se desarrolla lentamente y desfasada con respecto a lo que cabe esperar de un niño de esa edad cronológica.

 

 

Suelen aparecer algunos de los siguientes síntomas:

EXPRESIÓN

NIVEL FONOLÓGICO
• Suelen presentar patrones fonológicos desviados.
• Habla infantilizada, con omisión de consonantes iniciales y sílabas iniciales.
• La estructura silábica es: v, c+v, y no realiza c+c+v, o v+c.
• El grupo más afectado suele ser las fricativas, reduciéndose en algunos casos a las producciones /p/, /m/ y /t/.

NIVEL SEMÁNTICO
• Vocabulario reducido a objetos del entorno.
• Problemas en la adquisición de conceptos abstractos (colores, formas y espacio-temporales).

NIVEL MORFOSINTÁCTICO
• Desorden en la secuencia normal de la oración y lenguaje telegráfico.
• Número reducido de términos en la frase.
• Dificultades en la utilización de artículos, pronombres, plurales y alteración en la conjugación de los tiempos verbales.
• Presentan dificultad en la adquisición de frases subordinadas, éstas suelen ser coordinadas con la partícula «y».

NIVEL PRAGMÁTICO
• Alteración de la intencionalidad comunicativa.
• Predomina la utilización del lenguaje para: denominar, regular la conducta y conseguir objetos.
• Presenta dificultades para atribuir cualidades a los objetos y preguntar.
• Escasa utilización del lenguaje para relatar acontecimientos y explicarlos.
• Apenas utiliza el lenguaje en la función lúdica o imaginativa.
• Tendencia a compensar la expresión verbal deficiente con mímica y gestos naturales.

COMPRENSIÓN
La comprensión aunque, aparentemente puede ser normal, es aproximativa y contextual, comprendiendo mal las nociones abstractas, con dificultades, por ejemplo para relatar hechos, en los que simplificaría solamente enumerándolos

SINTOMATOLOGÍA ASOCIADA
• Generalmente el retraso del lenguaje viene asociado con una Inmadurez (Prematuridad, hospitalismos, etc.) generalizada, que afecta a la coordinación psicomotriz (Coordinación gruesa y fina, inmadurez o problemas de lateralización), dificultades en la estructuración temporo-espacial (dibujo desordenado en una lámina), a veces esta inmadurez afecta psicoemocionalmente apareciendo una baja autoestima, sentimientos de inferioridad, etc.
• Ligero retraso motor en movimientos que requieren una coordinación fina.
• Retraso en la expresión gráfica.
• Retraso en el establecimiento de la dominancia lateral.
• Dificultades en aspectos del desarrollo cognitivo: relación pensamiento/lenguaje y memoria/atención.
• Problemas psicoafectivos: baja autoestima, dificultades en las relaciones con los iguales (Inhibiciones).
• Dificultades en el aprendizaje de la lecto-escritura y otros aprendizajes escolares.

FACTORES PREDISPONIENTES
Puede haber predisposición hereditaria, factores neurológicos (Disfunción cerebral mínima), factores socioculturales (Niveles familiares socioeconómicos y educativos bajos), factores afectivos y relacionales (Actitudes sobreprotectoras, o rechazos familiares, deprivación, etc.) o un modelo lingüístico pobre, insuficiente o inapropiado.

TIPOS Y NIVELES
La gravedad del trastorno estará condicionada por el grado de afectación de los distintos niveles: Vocabulario, más o menos reducido, afectación mayor o menor de la comprensión, morfosintaxis más o menos evolucionada, asociación de otros trastornos en mayor o menor medida ( Lectoescritura, lateralidad, ambientalismos más deficiente, etc.).

CARACTERÍSTICAS DIFERENCIALES
• Hay que excluir una patología orgánica general, un déficit importante del oído, un hándicap motor manifiesto, así como trastornos mayores de la personalidad.
• Descartar la posibilidad de una deficiencia intelectual, o un tipo de mutismo, afasias infantiles y autismo (en el que el lenguaje está alterado, no retrasado y además, presenta problemas en otras áreas y conductas).
• Hay que diferenciar entre Retraso del Habla y Retraso del Lenguaje, en el primero sólo está afectado el nivel fonológico, mientras que en el Retraso del lenguaje están todos los códigos afectados.
• En la Disfasia destaca la gran lentitud de la evolución y la respuesta lenta a la intervención pedagógica. El Retraso del lenguaje, tienen una recuperación más acelerada y una respuesta positiva a la intervención y se encuentra menos afectada la comprensión.

CRITERIOS
• Dificultades en el desarrollo del lenguaje a nivel fonológico, semántico y morfosintáctico.
• Repercusiones en el desarrollo de aspectos funcionales del lenguaje.
• Comprensión alterada, pero en menor medida que la expresión.
• Dificultades, en los aprendizajes escolares.
• Todo ello, no es debido a deficiencias sensoriales, intelectuales, motóricas o neurológicas.