La Diputación de Jaén ha repartido un total de 142 desfibriladores semiautomáticos entre los ayuntamientos de la provincia que han solicitado estos equipos a través de una convocatoria de la Administración provincial que ha supuesto una inversión de más de 140.000 euros. El presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, acompañado de Javier Torres, presidente electo de la Sociedad Andaluza de Cardiología, y de la cardióloga María Rosa Fernández, ha entregado estos desfibriladores semiautomáticos externos, una acción que forma parte del plan “”Jaén, provincia cardioprotegida”.
“Esta iniciativa surgió en una reunión con la asociación provincial de enfermos cardiacos a la que asistió la doctora Fernández, en la que contemplamos la posibilidad y la necesidad de dotar a los municipios de la provincia de desfibriladores, especialmente pensando en los vecinos y vecinas que usan las infraestructuras polideportivas. La pandemia y las dificultades de suministro de estos equipos ha hecho que hasta el día de hoy no hayamos podido entregar estos desfibriladores semiautomáticos que han supuesto una inversión de más de 140.000 euros”, ha señalado Francisco Reyes, que ha insistido en la necesidad de destinar estos recursos a la prevención frente a infartos o problemas cardiacos. “Equipar un centro deportivo con un desfibrilador garantiza la tranquilidad de usuarios y empleados ante una emergencia cardiaca”.
Junto a la entrega de los equipos a los ayuntamientos, Reyes ha recordado que durante el pasado mes de mayo se organizaron una serie de acciones formativas homologadas sobre reanimación básica y uso del desfibrilador, en las que participaron más de 400 personas.
La cardióloga María Rosa Fernández ha puesto el acento en la importancia de tener este tipo de equipos “a pie de calle, para que los puedan usar todos los vecinos. Al año se producen en España más de 30.000 muertes súbitas en España al año, y los primeros 10 minutos son esenciales para mejorar las probabilidades de supervivencia. Tener un desfibrilador semiautomático y una básica formación de reanimación cardiopulmonar es fundamental para salvar vidas”, ha insistido.
Con respecto al modelo de desfibriladores entregado a los ayuntamientos, la doctora Fernández ha explicado que es de uso fácil e intuitivo. “Pueden ser utilizados por cualquier persona, porque vienen muy bien las instrucciones, realmente funcionan y no es necesario que lo use personal sanitario, de ahí la importancia de que sean de acceso público”, ha concluido.