A finales de este mes de abril, el artista Belin viaja a New York, concretamente al barrio New Rochelle donde sobre un mural de grandes dimensiones reinterpretará con su estilo más personal: El postneocubismo, la obra Girl at Mirror (1954) de Norman Rockwell.
El Festival Street Art for Mankind es una organización sin fines de lucro en New York que ha ayudado a 80 artistas internacionales a crear murales con temas de derechos humanos y exhibirlos en concurridas aceras peatonales en las principales ciudades. El objetivo es captar la atención y desencadenar la acción.
Norman Percevel Rockwell fue un ilustrador, fotógrafo y pintor estadounidense célebre por sus imágenes costumbristas llenas de ironía y humo.
“Arte para el Cambio Social”
Siguiendo la línea del primer cubismo, el postneocubismo rompe con el modelo de representación de la tradición occidental y reinventa el lenguaje plástico. Los distintos puntos de vista que conforman el objeto tridimensional convergen en la superficie pictórica. Mediante esta llamada «perspectiva múltiple» representa todas las partes de un objeto en un mismo plano.
Siguiendo la línea del primer cubismo, el postneocubismo rompe con el modelo de representación de la tradición occidental y reinventa el lenguaje plástico. Los distintos puntos de vista que conforman el objeto tridimensional convergen en la superficie pictórica. Mediante esta llamada «perspectiva múltiple» representa todas las partes de un objeto en un mismo plano.
Tal y como habían hecho sus compañeros los “neo”, el postneocubismo también introdujo una nueva nota a la partitura cubista: el realismo. Sin embargo, las técnicas empleadas en la representación, acorde con las nuevas derivas estéticas de finales del siglo XX, fue el arte urbano. El resultado es un nuevo estilo totalmente creativo, original y único, que bebe de los grandes maestros del pasado como Picasso y Miró, filtrado por la nueva cultura urbana del siglo XXI.
SAM se construyó en torno a la lucha contra el trabajo infantil y la trata, y sigue siendo su enfoque principal. Porque creemos que juntos podemos crear un mundo Child Friendly. Audrey y Thibault Decker son apasionados del arte. También se preocupan profundamente por el tráfico de niños, el hambre global y otros temas de derechos humanos. Su objetivo era combinar los dos.