La magia y la ilusión se apoderaron de Linares en la tarde del sábado con la celebración de la Gran Cabalgata de Reyes, un evento que congregó a cientos de familias en las principales calles de la ciudad. Este año, debido a la previsión de lluvia, el Ayuntamiento adelantó el tradicional desfile, que se convirtió en una de las celebraciones más esperadas y coloridas de la temporada navideña.

A partir de las 18:30 horas, la comitiva real inició su recorrido desde la calle Jaime I «El Conquistador», pasando por lugares emblemáticos como Alfonso X El Sabio, Sagunto, Plaza de San Francisco, Isaac Peral, Gumersindo Azcárate, Bailén, Avenida Andrés Segovia, Baños, Plaza Ramón y Cajal, Plaza del Ayuntamiento y Avenida de Andalucía, hasta culminar en la Plaza Aníbal e Himilce.

El desfile contó con vistosas carrozas decoradas por diversas asociaciones y colectivos locales, acompañadas de animados pasacalles y charangas que llenaron el recorrido de música y alegría. Las luces, los colores y los disfraces cautivaron a pequeños y mayores, quienes disfrutaron de una experiencia única marcada por el lanzamiento de caramelos y gominolas desde las carrozas.

La Cabalgata, presidida por Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente, reafirmó su papel como uno de los eventos más entrañables de la Navidad en Linares. Este espectáculo de luz, sonido y tradición volvió a unir a la ciudad en una tarde repleta de emociones, anticipando la noche más mágica del año.