Agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo de Estupefacientes y Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Linares han detenido a tres personas de 30 y 37 años de edad, como presuntos
autores de un delito de tráfico de sustancias estupefacientes. Tanto los investigadores de estupefacientes como los agentes del Grupo Operativo de Respuesta (G.O.R), se habían coordinado y colaborado en el diseño de un plan específico contra el tráfico ilegal de estupefacientes. Fruto de ese plan, los agentes controlaron las zonas más sensibles de la ciudad donde se habían detectado puntos de venta, deteniendo a tres personas que venían a la ciudad a comprar droga para, después, abastecer de la misma a sus respectivas localidades de origen. A los arrestados se les incautaron
62 gramos de cocaína.

El G.O.R había establecido un dispositivo de control de vehículos, concretamente en la salida de Linares sentido Guarromán. En un punto determinado los agentes interceptaron el vehículo del arrestado de 30 años de edad. Momentos antes, presuntamente había adquirido 22 gramos de cocaína en un punto de venta de la barriada de Arrayanes, con la intención de transportarlos hasta su localidad de origen; Villacarrillo, donde supuestamente abastecería uno de los puntos de venta de localidad. La droga decomisada se encontraba distribuida en cuatro envoltorios de plástico.

Operación “Pulmón”
Al día siguiente, el G.O.R., volvió a establecer un nuevo dispositivo de control a la salida de la Estación Linares-Baeza. En un punto determinado los agentes observaron a dos personas, ambas de 37 años de edad, a bordo de un vehículo, quienes al percatarse de la presencia policial emprendieron la huida, siendo finalmente interceptados por los agentes que les arrestaron.

Encontrando en el vehículo un envoltorio con 40 gramos de cocaína. Ambos se dirigían hasta su localidad de origen; Bedmar, presuntamente para abastecer un punto de venta de droga. La autoridad judicial decretó el ingreso en prisión de ambos.

Con estas últimas operaciones policiales, junto a las anteriores, se constata cómo la ciudad es un punto de abastecimiento de sustancias estupefacientes; concretamente cocaína, no solo a nivel local, también a nivel provincial.