CSIF ha denunciado que Correos no ha contratado los suficientes refuerzos en Andalucía para la campaña de Navidad, que comenzó el 1 de diciembre y concluirá el día 31, a pesar de tratarse de la época del año con mayor carga de trabajo. Según los datos del sindicato, las incorporaciones han sido sólo 870, lo que supone un 59,7% menos que las 2.160 que llegaron en 2020. Concretamente en la provincia de Jaén, estas incorporaciones se reducen un 67,5%, superando así la media andaluza, y pasando de 160 contrataciones a 52. A esta drástica reducción, se le suma la “insignificante” subida de 1,46 euros en la gratificación fija que recibirán los empleados y empleadas en concepto de mayor productividad, que CSIF ha definido como “miseria”. CSIF recalca que la disminución de recursos humanos en general en toda la comunidad “choca con las necesidades reales del servicio”.

Desde el sector de Entidades Públicas Empresariales de CSIF han asegurado que Correos “ha perdido una nueva oportunidad de mejorar las cosas” y ha pronosticado que “el personal tendrá que hacer un doble esfuerzo y afrontar ritmos inasumibles de trabajo a cambio de una miseria”. En concreto, la gratificación pasa de 101,38 a 102,84 euros, lo que supone un aumento del 1,4% que “riñe totalmente con lo que ha subido la vida y con la petición del sindicato, que exigió llevarla a los 120 euros”.

Además de la gran diferencia entre los refuerzos de un año y otro, CSIF lamenta que casi un tercio de esos contratos temporales, en concreto el 28%, sean sólo por jornadas de cinco horas. “Con esta invasión de contratos a tiempo parcial manifiesta y desesperante, el personal seguirá desbordado, sin posibilidad de cubrir bajas ni permisos”, apostilla José Blas Martínez, responsable del sector en Jaén, que igualmente destaca “la presión crónica e innecesaria en una empresa pública” que padecen sus trabajadores. “Lo que está pasando no es justo. Los empleados no dan abasto y aun así sacan adelante un servicio que siempre ha sido esencial, más incluso desde que estamos en pandemia”, añade.

CSIF también reclama que se firme un plan estratégico para la viabilidad de la empresa, que en la comunidad cuenta con unos 8.000 trabajadores, entre otros motivos para acabar con una tasa de temporalidad que supera el 30%. “Aquí no se contrata a casi nadie. El número de jubilaciones y empleados que se marchan a otras administraciones no se detiene y sus plazas no se cubren. Tememos por el perjuicio que sufrirá la ciudadanía cuando llegue el pico más alto de esta campaña de Navidad, que tradicionalmente llega justo ahora, después del puente de la Constitución”, concluye.