La verdad solo tiene un camino… Y es tenaz.
Mucho se ha escrito y opinado sobre la posible existencia de un Refugio Antiaéreo en la antigua Fábrica de La Constancia.
A mí, particularmente, me divierte la investigación. Soy curioso por naturaleza. De sobra es conocida mi opinión sobre si allí existió un refugio o no. No es importante, mi opinión, digo. Ni la de otros. Es lo que tiene la investigación histórica.
Más importante es que en base a la opinión de alguien se tomen decisiones que afectan a nuestro patrimonio histórico. Al patrimonio de todos.
Responsables son ellos y los políticos que toman las de decisiones. Especialmente si la decisión es destruir nuestro patrimonio con decisiones equivocadas… O no sustentadas en investigación histórica.
El caso es que en base a un trabajo de investigación, liviano por lo que parece, se tomó la determinación de destruir, derrumbar, sin investigación seria previa, el Refugio Antiaéreo de la Fábrica de La Constancia.
Hace unos días comentaba yo, siempre con precaución, que las fuentes escritas muchas veces son desmentidas por la evidencia material. Cualquier investigador histórico, o arqueólogo, lo sabe bien.
Y en ocasiones, después de la evidencia material, incluso aparece el documento histórico que ratifica lo que tus ojos ven.
Este es el caso de nuestro refugio de La Constancia. Ya no está…
Pero sí la documentación de su existencia que, montaraz, ha aparecido en el Archivo en el que el más pueril investigador hubiese urgado con prontitud. Al menos así lo he hecho yo.
Lo he dicho, la verdad histórica es tenaz.
De momento aquí os dejo copia del documento que ratifica la existencia de NO UNO, SINO DOS refugios antiaéreos en nuestra fábrica. Y un par de fotos para la nostalgia.
Me gusta pensar en la originalidad de haber integrado el refugio en el nuevo supermercado, haciéndolo doblemente atractivo.
Como el documento es extenso, CONTINUARÁ…