Viendo cómo nuestros políticos dan más importancia a la televisión que al Parlamento, viendo el papel de monigotes que están obligados a hacer el 99 % de los diputados, que “ni pinchan ni cortan” y que no sirven para otra cosa que para hacer número en el hemiciclo, viendo que todos los diputados se ven obligados a votar “lo que dice el jefe o el partido”, viendo que las decisiones no se toman en el Congreso sino en la sede de los partidos y viendo lo aburrido que tiene que ser para los diputados pasar las horas muertas en la cámara, si no tienen a mano un revista frívola o un juego en el móvil, creo que lo más acertado y más económico sería suprimir de un plumazo el 98 ó 99 % de los diputados. ¿Alguien me puede decir para que sirven tantas personas pasivas y durmientes en el hemiciclo, que se pasan años sin tener una sola intervención y sin escribir una sola línea?
Que sirven para emitir su voto en el momento de las votaciones, me diréis. Pero ¿no sería mucho más sencillo que el voto de cada uno de los jefes de partido tuviera el valor que correspondiera al porcentaje de los votos obtenidos en las elecciones? ¿Es que no sabemos de antemano que todos los miembros de un cada uno de los partidos van a votar en el mismo sentido? ¿Es que hay algo más antidemocrático que el que los representantes nuestros, que en principio están obligados a hacer lo que les estamos pidiendo, no hagan el más mínimo caso de lo que les hemos dicho ya dos veces?
Como los partidos políticos no van a cambiar de momento, creo que lo más acertado actualmente sería que desapareciera el 98 % de los diputados tanto nacionales como autonómicos.
Hace ya más de un año escribí con el título ”España y Europa a la deriva”, entre otras las siguientes frases:
“Pero la negra historia de los refugiados nos ofrece, además, otra imagen que responde a la realidad de Europa y de España: una barca a la deriva. No es una casualidad lo que nos está ocurriendo en Europa. La espalda que Europa está dando a los refugiados es esa misma espalda que viene dando desde hace tres décadas a los ciudadanos. Hemos creado una Unión Europea del Gran Capital, de los grandes acuerdos comerciales que permiten explotar tanto a los ciudadanos de los países emergentes con sueldos bajos, como a los ciudadanos europeos con la amenaza y el fantasma de la deslocalización. La UE, que fue la iniciadora de la globalización como una forma de entendimiento entre los ciudadanos europeos, ha sido víctima de la manipulación de su idea por parte del gran capital.
El mal de España es el mal de Europa y viceversa. Y el remedio tiene que ser el mismo. Los mismos políticos que gobiernan o vienen gobernando la UE son, con pequeñas diferencias, los mismos políticos que vienen gobernando a España. El mal no está en España, ni en Europa…. El mal es esa pandemia que afecta a toda Europa, con pequeñas diferencias, que se llama partitocracia o dictadura de los partidos. A Europa y a España le faltan líderes, porque los partidos políticos nos imponen unos jefes de filas mediocres o nulos. Son los partidos políticos los que han secuestrado a Europa, porque en una Unión política ellos perderían poder y protagonismo y en una España de los ciudadanos los partidos políticos no podrían imponer a sus jefecillos de turno. ¿Creéis realmente que los ciudadanos españoles, portugueses y franceses, p.e., no llegaríamos a entendernos y superar los complejos nacionales, si no intervinieran los políticos?
Ninguno de los problemas que teníamos hace un año, ha quedado resuelto. Más bien todos han empeorado. Ha aumentado la pobreza, también la xenofobia, los atentados y la inseguridad. Mientras tanto, los partidos políticos se lo pasan en grande. Sueldo sin trabajar y aparición diaria en la televisión ¿con sobresueldo?
Interesante reflexión. El sistema de partidos hay que cambiarlo, está claro que no funciona, así como nuestro sistema electoral.
Dejar en manos de cuatro o cinco líderes políticos una nación me parece peligroso. Las oligarquías estarían al acecho, incluso las dictaduras.
Por lo tanto algo diferente habría que hacer, que no se hará porque no es voluntad de los dirigentes y partidos actuales y porque los ciudadanos adormecidos en la comodidad no van a mover un dedo.
Aprovechando las nuevas tecnologías se podrían tomar decisiones importantes con la opinión incluso el voto de los ciudadanos. Pero eso también depebderá de que algún partido haga lad prpuestas, cómo hemos visto en UK y su salida de Europa.
No necesitamos esta manera de hacer las cosas. Un sistema más USA al tiempo que asambleario dónde los representantes fueran elegidos más como personas que como representante de un partido podría resultar. Pero, quién arranca del inconsciente colectivo la partitocracia si la educación sigue en manos del gobierno de turno y de Tele5?
Saludos cordiales.
Totalmente de acuerdo con el articulista y con el comentario del Sr. Ad Contrarium.
Mis saludos para ambos.
Comparto totalmente las reflexiones del articulista Sr. de la Fuente Pascual, así como la respuesta del Sr. Ad Contrarium. En un sistema político como el español en el que los representantes del pueblo sean unos convidados de piedra tanto en el Congreso como en el Senado y la obediencia ciega al partido con la disciplina de voto sea elemento esencial para permanecer en el cargo, en detrimento de las necesidades de la ciudadanía, poco se avanzará en democracia.
Sin ser algunos políticos norteamericanos, ejemplos de nada, en el caso del violento, racista, irrespetuoso y xenófobo Donald Trump ya hay voces dentro de su partido manifiestamente opuestas a su estilo y forma de hacer política y eso ya es un avance en democracia.
Una contradicción detrás de otra : Los partidos políticos son los culpables y es presidente de un partido. El gran capital marca la pauta y condiciona y saca grandes beneficios; pues serán los partidos los que hagan políticas que protejan esos intereses en su mayoría, pero no se puede generalizar a no ser que solo excluya el suyo. ¿ Como se compatibiliza el principio de participación y representación, sectores sociales, culturales y territoriales, reduciendo el 90% la representación en los Parlamentos?. ¿Acaso no serian estos mas vulnerables a las grandes corporaciones económicas?, teniendo en cuenta que los grandes medios de difusión y persuasión están en manos del Gran Capital y las mismas leyes (como en España) favorecen a los grandes Partidos, los pequeños desaparecerían de ese 10% que se defiende. Y por último la denostada disciplina de Partido. Los Partidos representan en el fondo también intereses de Clase, como antes hemos señalado. Los Partidos se presentan con un programa y con una base ideológica, y los representantes, que salvo excepciones ( PP) han sido elegidos democráticamente en sus respectivas organizaciones, deberán dar cuenta a estas de sus debates y gestiones y sacar conclusiones periódicas democráticas frente a los retos y vicisitudes que en el trascurso de su representación surjan ( el debate continuo es fundamental, frente a los iluminates de tuno). De lo contrario podían presentarse candidaturas individuales si representación ninguna y sin compromiso colectivo y tendrán que pagarse su propia campaña o ponerse al servicio de algún grupo económico que lo financiara. De eso los estadunidenses saben un rato.