Hablamos de los derechos de los mayores, de los niños, de las mujeres… Hablamos de los derechos de las personas homosexuales, de las heterosexuales… Hablamos de derechos humanos, y de derechos de los animales…
Hay derechos de los que no se habla. Nunca hablamos, por ejemplo, de los derechos del hombre, posiblemente para no ser tachados de machistas. Tampoco se habla de los derechos del no nacido (nasciturus), quizás, en este caso, por aquello que dijo cierta ministra socialista: “un feto de 13 semanas es un ser vivo, pero no un ser humano”.
Desde la célebre frase, parece que el debate sobre el aborto va más allá de un simple posicionamiento a favor o en contra, nos toca ahora plantearnos una pregunta clave:
¿qué es un no nacido?
Los defensores de la vida sostienen que el aborto acaba injustamente con la vida de un ser humano indefenso, por lo que no hay justificación para su elección. En caso de que el no nacido no fuera un ser humano, la elección del aborto no necesitaría justificación que tranquilizara las conciencias.
El aborto no es fácil para la mayoría de las mujeres. Al contrario, es una decisión psicológicamente compleja, incluso agonizante en algunos casos. Pero la cuestión va más allá de lo psicológico hasta convertirse en una cuestión moral. Todo el mundo está de acuerdo en que el aborto mata a algo que está vivo. Luego todo depende absolutamente de la pregunta:
¿qué tipo de ser vivo es el no nacido?, ¿es humano, sí o no?
Algunas personas rehúyen a propósito esta pregunta. Simplemente asumen que el no nacido no es un ser humano y se lo quitan como si se quitaran un grano molesto.
Para la ciencia los hechos son claros: desde las etapas más tempranas del desarrollo, los no nacidos están vivos y son seres humanos completos. Por lo tanto, cada aborto “exitoso” finaliza la vida de un ser humano vivo. Una vida humana comienza en la conclusión del proceso de concepción.
Para la filosofía el punto de vista a favor de la vida es inclusivo, profundamente abierto a todos, especialmente a los que son más pequeños, vulnerables e indefensos.
Algunos defienden sin fundamento que el hijo aún no nacido forma parte del cuerpo de la madre, y que es ella la única que puede decidir sobre el destino del hijo. La realidad demuestra categóricamente que el hijo es un ser por completo distinto de su madre, con su propio código genético y su propio sistema inmunológico, que se desarrolla y reacciona por su cuenta, aunque la dependencia de su madre sea muy intensa, dependencia que, por cierto, continúa mucho tiempo después del nacimiento.
Por tanto, pretender que el hijo forma parte del cuerpo de la madre no es, en el mejor de los casos, más que una muestra de absoluta ignorancia.
Hay que recordar que los no nacidos son los humanos más débiles, que necesitan de una mayor protección de todo tipo.
La Declaración sobre Derechos del Niño, que entró en vigencia a nivel Internacional en 1990, declara en su preámbulo: “El niño, por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidados especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después de su nacimiento”.
En el pasado, se acostumbraba a discriminar en base al color de la piel y al género, pero ahora, con el aborto por elección, discriminamos basándonos en el tamaño, el nivel de desarrollo, la ubicación y el grado de dependencia. Simplemente cambiamos una forma de intolerancia por otra.
¿Hasta dónde se pueden ejercer los derechos individuales?
Como es sabido, los derechos humanos no son absolutos, sino que tienen límites de “hecho” y de “derecho”. Los límites de “hecho” se deben fundamentalmente a situaciones sociales o económicas que restringen el ejercicio de los mismos, (por
ejemplo, el derecho al trabajo en el caso de escasez del mismo). Sin embargo, los límites de “derecho” radican en propio sistema jurídico o como consecuencia del carácter del mismo, poniendo límites a los derechos en el derecho ajeno. Es decir, el ejercicio de un derecho puede chocar con el derecho de otra persona, como es el caso del derecho a decidir de la mujer en el aborto, pues choca frontalmente con el derecho a la vida del nasciturus.
Como no podría ser de otra forma, las mujeres tienen derecho a tomar sus propias decisiones, pero en el caso de embarazo no puede decidir sobre el destino de su hijo y tomar la decisión de abortar.
Si el no nacido es también un ser humano, no debería matársele en nombre del derecho a decidir sobre su cuerpo, de igual forma en que no lo haríamos con un niño pequeño. Pero ese es el problema, ¿no? ¿Son los no nacidos seres humanos como los niños pequeños? Ese es el problema que importa y por mucho que queramos, no podemos escapar de él.
Como reflexión evoco a la música, en este caso a unas “sevillanas” de nuestro popular grupo rociero “ALGARABÍA”, escrita por el letrista y compositor Juan Tarifa.
YO QUIERO NACER
Yo quiero nacer, no me mates madre mía.
Quiero ser fruto en tu vientre y madurar algún día.
Quiero yo ver con mis ojos, ese mundo donde vives y que con los tuyos ves.
No me mates madre mía, tengo derecho a nacer.
Yo quiero nacer, quiero saber que es un beso.
El arrullo de tus brazos, el dormir sobre tu pecho.
Quiero yo ver con mis ojos, ese mundo donde vives y que con los tuyos ves.
No me mates madre mía, tengo derecho a nacer.
Yo quiero nacer, yo quiero llamarte madre.
Y ocupar el sitio vacío, que a ti te dejo mi padre.
El sembró en ti la semilla y al ver que ya crecía, te dijo que la cortaras.
Madre déjame que nazca para tirárselo en cara.
Yo quiero nacer, aunque seas madre soltera.El mundo criticará pa mi serás la primera.
El sembró en ti la semilla y al ver que ya crecía, te dijo que la cortaras.
Madre déjame que nazca para tirárselo en cara
El mundo criticará pa mi serás la primera.
El sembró en ti la semilla y al ver que ya crecía, te dijo que la cortaras.
Madre déjame que nazca para tirárselo en cara.
Por fin alguien expresa con sosiego y claridad la postura de muchos, entre ellos yo. Gracias. Es así de simple. Muchos estamos convencidos de que el no nacido es un ser humano y, como tal, tiene derechos inalienables que no pueden depender de el arbitrio de nada ni nadie, y, como corolario, que eliminarlo es un acto abominable. Otros piensan lo contrario. Es evidente que debemos ponernos de acuerdo, en un debate social riguroso y serio en el que, para empezar, no se nos llame machistas, fachas, antidemocráticos, radicales, etc. etc. Pero desgraciadamente, tengo pocas esperanzas: ahora sólo hay que esperar la que va a caer en los comentarios que vengan a contiuación.
Con todos mis respetos. Hace usted un alarde de demagogias bastante facilonas. A veces, incluso, insultando a las señoras que han decidido o no han tenido más remedio que abortar. ¿Un grano en dónde?
¿De qué ciencia habla? ¿La ciencia puede determinar cuándo y cómo somos seres humanos? Hay tantos criterios cómo científicos (documéntese)
También a algunos filósofos, pues la moral es exclusiva, ¿de quién? ¿es válida sólo la moral antiabortista?
Y no digo nada de llegar al corazón a través de la canción.
¿Por qué nos gusta tanto intervenir en las decisiones de los demás? ¿Por qué no miramos la viga en nuestro ojo antes de la paja en ajeno?
Con ocuparnos de nuestra propia vida , ver si es correcta, si hacemos daño a los demás, a veces con un simple comentario, ya tenemos tarea para eso, para toda una vida.
Hay muchos nacidos a los que hay que ayudar…
Saludos cordiales.
Ad Contrarium,
Dice usted que el Sr. Garrido en su artículo hace alarde demagógico y que insulta a no sé cuántas señoras.
La demagogia real significa el arte, la estrategia o el poder para conducir al pueblo. Es una forma de acción política en la que existe un claro interés de manipular o agradar a las masas.
Sin embargo la demagogia en sentido figurado, es una práctica, una manipulación deliberada de aquellos que aparentan humildad u honestidad con el fin de obtener favores poco claros y ganarse a alguien, expresando en público sus ideas y sus opiniones utilizando argumentos bien hablados que supuestamente serán agradables para los que están escuchando pero que en realidad están manipulando los sentimientos, las emociones y la voluntad de la gente con falacias y mentiras.
Supongo que usted se refiere al sentido figurado y no en el sentido real de hacer demagogia. Pero por más que leo el artículo en cuestión no encuentro donde está la demagogia que usted alude.
Tampoco encuentro el insulto a las señoras que sin desearlo han abortado; y si lo han hecho deseándolo pues que quiere que le diga… ponga el grano donde quiera, pero será un grano molesto.
Sr. Ad Contrarium, el artículo es un artículo de opinión que se podrá compartir o no, al igual que su propio comentario.
Todavía estoy buscando la ley sobre interrupción «Obligatoria» del embarazo……¡¡¡Es curioso….no la encuentro por ningún lado!!!
Envidio vuestra infinita bondad. Me llena profundamente de asombro el gran amor y la gran preocupación que sentís por todos los fetos ajenos…….¡¡¡Qué generosidad la vuestra, que quereis llevar por el camino recto, de la moral y la decencia a todas esas descarriadas y potenciales asesinas de niños!!!
¡¡¡Qué envidia, que estais «A favor de la vida»!!!, mientras nosotros, pobres desgraciados, estamos «A favor de la muerte» (¿No es eso?…..)
Por cierto…..¿En qué siglo estábamos?……
Por cierto : La letra de las sevillanas esas de Algarabía, aparte de ser de pésimo gusto, es de las cosas más ridículas que he leido en mi vida……Menos mal que nunca he escuchado la canción porque, seguramente me habría dado urticaria o ardor de estómago……..¡¡¡Joder, son más vergonzantes que «Los del Río» !!!…….
Estoy totalmente de acuerdo con la opinión del articulista, y en absoluto me parece su haya nada de demagógico en sus argumentos, sólo hace una reflexión seria y sosegada desde su creencia de que el no nato para él, es un ser humano completo, postura bastante extendida entre la opinión pública, tanto de científicos, como de ciudadanos sin formación específica en el tema; existiendo también una corriente contraria. Se trataría sólo de puntualizar, que un Estado laico aconfesional como el nuestro no debe ni puede legislar desde presupuestos morales. Quienes opinan como D. Gregorio están en su derecho de no abortar cuando se les presente el caso, de la misma manera que quienes no opinan como él, han de tener la posibilidad despenalizada de hacerlo, si así lo desean y su conciencia se lo permite.
Enrique J. Valdivia : Me parece usted un verdadero demócrata y le felicito por ello…….Teniendo una opinión distinta a la mía, no trata usted de imponer su criterio ni su moral a los que piensan distinto, y en este tema del aborto, de eso se trata……Es que no hay ningún debate posible. Allá cada cual con su moralidad sin imposiciones de terceros…….
Saludos cordiales…….
Aquí se ha dado en el clavo. El feto es un grano molesto, se le niega la condición de humano para poder matarlo sin que nos tiemble el pulso. Y, en contra de lo que dice el artículo, el aborto no es ni por asomo traumático para la mujer, cuando hay mujeres que han abortado hasta 3 veces sin pena alguna. España, con la mitad de población que Alemania, tiene el doble de abortos. Tenemos que hacérnoslo mirar.
Porque estamos peor y más inseguros y precarios.
Miren, yo respeto las opiniones de cada uno de ustedes; pero el artículo hace afirmaciones tajantes acerca de cómo deben comportarse las muejres y cómo debemos opinar los demás, además de juzgar a quienes no pensamos como el articulista; si esto es reflexionar…:
«Para la ciencia los hechos son claros: desde las etapas más tempranas del desarrollo, los no nacidos están vivos y son seres humanos completos». (¿Qué pruebas ciéntificas avalan lo de ser o no humano, si esto es un concepto no objetivo? Es sólo la opinión de algunos científicos)
«Algunos defienden sin fundamento que el hijo aún no nacido forma parte del cuerpo de la madre, y que es ella la única que puede decidir sobre el destino del hijo» (¿por qué sin fundamento? El mismo que quienes avalan lo contrario, pura filosofía)
«Por tanto, pretender que el hijo forma parte del cuerpo de la madre no es, en el mejor de los casos, más que una muestra de absoluta ignorancia» (la premisa anterior no nos lleva a esta conclusión porque no es una condición para que ésta se cumpla en todos los casos, es sólo una opinión)
«Como no podría ser de otra forma, las mujeres tienen derecho a tomar sus propias decisiones, pero en el caso de embarazo no puede decidir sobre el destino de su hijo y tomar la decisión de abortar» (¿Quién lo decide, Papá Estado, una Confesión Religiosa, una Ideología, o personas que ni siquieran conocen a la madre ni sus circunstancias personales?)
Nadie aborta por deporte, eso ténganlo en cuenta. Además, quienes deseamos una Ley del aborto para legislar una realidad social y, en muchos casos, una necesidad individual, no pretendemos que sea obligatiorio, ni siquiera que se haga uso de dicha Ley; cuánto menos mejor; pero creemos que es necesaria para evitar males mayores y judicializar un acto que no se hace por hacer la gracia.
Y perdone Sr. Garrido, porque esto no es nada personal, ni quisiera que lo pareciera, este comentario va destinado al resto de personas que han dado su opinión en este foro.
Un cordial saludo.
Déjalo, amiguete Ad Contrarium…..No van a hacer ni el más mínimo esfuerzo por entender las evidencias que dices…..
Es como intentar sacar agua de un pozo seco…..Es una cerrazón de muchos años…..El candado que cierra algunas mentes se ha oxidado por el paso del tiempo y es prácticamente imposible abrirlo.
Es por esto por lo que es tan fundamental la educación……Por supuesto una educación en libertad, democracia, igualdad y tolerancia, desde la más temprana edad……O sea, todo lo contrario al catolicismo.
Saludos……
Las opiniones solo sirven para acercar una hipótesis supuestamente plausible a algo que no se puede objetivar.
En el momento actual del conocimiento desde las ciencias biología, embriología, genética y medicina… resulta algo objetivo y no opinable el hecho de que, el ser concebido a partir de gametos humanos, es en SER HUMANO. Nos lo acredita su dotación genética, su individuación, su autonomía dirigiendo su propio proceso de maduración y desarrollo, y el hecho cierto de que, si no se le elimina por el camino termina su proceso de gestación naciendo como un hermoso churumbel del que nadie, en su sano juicio, dudaría de su naturaleza humana… y ello a pesar de que todavía le queda mucho tiempo para terminar su maduración y desarrollo que continuará imparable casi 20 años más.
Que no es parte de la mujer es tan obvio como que ni puede concebirlo sola (necesitando el concurso del que sería su padre); y como que, de no admitirlo, tendríamos el problema de averiguar que parte de la mujer-madre es la placa donde se genera in-vitro en los casos de FIV.
Para no alargarme mucho y terminar quiero quedarme con un párrafo de D. Gregorio Garrido García, cual es:
«En el pasado, se acostumbraba a discriminar en base al color de la piel y al género, pero ahora, con el aborto por elección, discriminamos basándonos en el tamaño, el nivel de desarrollo, la ubicación y el grado de dependencia. Simplemente cambiamos una forma de intolerancia por otra.»
Al que apostillo que en «el pasado» las discriminaciones (injustas, por supuesto) resultaban menos cínicas que las actuales, en razón de lo que se sabe hoy y que se ignoraba en determinado pasado.
HOY SE TRATA DE INTOLERANCIAS BASTARDAS, CÍNICAS Y EGOISTAS.
¡¡Un todo por mi faltriquera o mi ego!!
Hoy se miente descaradamente para disimular lo inconfesable.
Un extraordinario artículo que merece una mayor difusión. Trataré de replicarlo en nuestro Blog de Derecho a Vivir de Jaén (davjaen.org) aprovechando que el próximo día 10 es el día de los Derechos Humanos.
Joder, otro iluminao……
Vamos a ver, ¿Me estás comparando la interrupción del embarazo, con el racismo, el machismo o la homofobia?…..Por cierto, no hay cosa más ridícula que emplear un lenguaje finolis, para soltar barbaridades……»Aunque se vista de seda……
Si mañana mi compañera quedase embarazada, y decidimos no tenerlo, ¿Quién me va a obligar a tenerlo?….¿Tú?…¿Tú, y cuántos más?……¿Qué pasa, que quereis llenar los orfanatos, para que vuestros amiguetes los curas, tengan a quien meter mano, y vuestras queridas monjas tengan negocio para vendérselos a familias ricas?…..¿Me vas a decir que te preocupan muchísimo los «nonatos» ajenos?.
¡¡¡Menuda panda de hipócritas!!!……Ahora va a resultar que los católicos vais a dar lecciones de derechos humanos……..Anda y vete con tus otros amigos lunáticos a tu iglesia, a ponerle velitas a tus santos y a tus vírgenes, y a rezar vuestras tonterías……Y dejad a los demás tranquilos, y que vivan su vida como les salga de los cojones…….
A lo mejor, a más de uno, os impondría yo, el aborto obligatorio…….para que la idiotez no se reproduzca….
Hola
Como prometí, ya he replicado la entrada en el blog de DAV-Jaén y os doy el enlace para quien quiera consultarlo [ http://davjaen.blogspot.com.es/2014/12/derechos-humanos-si-pero-para-todos.html ].
De nuevo la enhorabuena a Gregorio Garrido y «Buenas Fiestas» a todos.