Hoy duerme,
está sumergido; lívido
silencio, atroz perjurio
de una herida absurda.
Caballero erguido
este sueño de recuerdos,
parálisis de la memoria
e impertinente muerte
de los sentidos.
Quiero susurrarle a sus oídos
o gritarle ante sus ojos,
que sigo aquí
que no me he ido,
aunque fui yo quien
se fue
y él quien está dormido.

En off

En off