Llega la Navidad, este año llena de pesimismo y malos presagios. Todos los medios de comunicación informan que 2013 será peor que 2012. Con independencia de nuestras creencias todos solemos pedir regalos o deseos en estas fechas, a Papá Noel, a los Reyes Magos o a las 12 uvas.

Visto el diagnóstico de la situación actual, en el que casi todos coincidimos, con un sistema democrático que no funciona (no hay verdadera separación de poderes judicial, ejecutivo y legislativo, donde las Instituciones se triplican, donde los poderosos hacen cuantiosos recortes económicos, sociales y civiles a la mayoría, mientras ellos siguen amparados en la corrupción y el despilfarro, donde los impuestos suben, y el desempleo más, donde el sistema de partidos, sindicatos, asociaciones empresariales y banca, monarquía y estamentos de poder de las religiones se han convertido en una reunión de “amiguetes” donde reparten lo que queda del pastel, sólo me resta hacer mi petición a los ciudadanos, a los que padecemos de verdad la crisis en mayor o menor medida, a la conciencia.

Y mi deseo es que seamos capaces de unirnos para cambiar este sistema.

El capitalismo, el neocapitalismo, el marxismo, el socialismo, el estado del bienestar… han fracasado estrepitosamente, habrá que hacer algo desde dentro o desde fuera para que las cosas mejoren.

Desde dentro del sistema, sin el apoyo popular suficiente, que no lo hay, es una utopia el cambio, y no hay garantía de que los partidos que aún no han ejercido el poder, al hacerlo, no se integren en el sistema corrupto actual (véase Andalucía, País Vaco o Cataluña).

Desde fuera, la “revolución” de masas no es posible, porque no somos eso, masa, sino individuos, cada uno con su pensamiento y con su idea de cómo mejorar las cosas; además son malas las brasas “cainitas” del 36 que permanecen en la memoria colectiva y que muchos se empeñan en reavivar.

Sólo se me ocurre pedir que nos unamos en propuestas concretas, para cambiar cosas concretas y hacerlo ciudad por ciudad, hoy en la nuestra, con independencia de ideologías, sólo en pos de alguna propuesta justa, y poco a poco ir construyendo soluciones. Por ejemplo, y da igual quien lo saque a la luz, ser activos todos en contra de los DESAHUCIOS (en este caso el 15M), o a favor de no tocar las pensiones por mandato constitucional (UCE, recoge firmas para ello), o Un sueldo Mínimo para cada trabajador (como propone “Frente Cívico -Somos Mayoría-“ ) o por la rebaja de sueldos de los políticos con cargo y del número de ellos y de Instituciones, o por repartir los famosos 36.000 millones entre los ciudadanos para que paguen al Estado, a bajo interés, las hipotecas que deben a los bancos quienes, al recibir este dinero, podrían reflotar la economía con créditos a autónomos y empresarios (como pienso yo), así, hasta cambiar el sistema político-social injusto que nos hemos dado. Sin siglas y sin banderas detrás, ya tendremos tiempo de debates políticos e ideológicos cuando mejoren los tiempos, pero siempre aprendiendo de los errores pasados. Ese es mi deseo para 2013.