Este año la afluencia total de visitantes a nuestro municipio con motivo de la Real Feria y Fiestas de San Agustín 2012 ha resultado ser sensiblemente menor que el año pasado; según muestra la ocupación total de los establecimientos hoteleros que en la media no ha superado el 70%, pese a las reservas de última hora. Este dato, explica también que, pese a los esfuerzos realizados por el Área de Turismo del Ayuntamiento en lo que a la apertura ininterrumpida durante toda la semana de Feria de los espacios museográficos se refiere, se hayan registrado menos visitantes que el año pasado. No obstante, se han contabilizado alrededor de 2.000 personas que han podido disfrutar de las infraestructuras turísticas de la ciudad así como de la variedad de ocio programada con motivo de la Feria, que unido a la creación de nuevos productos turísticos como son el “Bono Turístico” y las “Audioguías de la ciudad”, solicitadas no solo para la ruta del centro histórico sino también para el Conjunto Arqueológico de Cástulo y el Paisaje Minero, favorecen que cada año, nuestra ciudad se vaya consolidando como un destino competitivo y diferenciador en lo que respecta a la oferta de turismo de interior, tratando de aportar un su contenido patrimonial y una singular tradición histórica.
En lo que respecta a los espacios muesísticos vinculados con la Concejalía de Turismo del Ayuntamiento, El Pósito, Hospital de Los Marqueses de Linares y El Centro de Interpretación del Paisaje Minero; en las actividades organizadas con motivo de la cita anual con la Feria de San Agustín, destaca la «IX Edición de la Exposición de Minerales» que ha arrancado otro año más consiguiendo atraer a turistas y linarenses, registrando el día de su inauguración un total de 658 personas que mostraron un gran interés por su historia y su pasado minero. En esta tradicional exposición, además de los evocadores tesoros geológicos tanto de nuestra tierra (galena y linarita), como de diversas partes del mundo (Marruecos, Afganistán, Brasil, EEUU, etc.) facilitados por reputados coleccionistas linarenses; la introducción de nuevas maquetas, como la archiconocida chimenea coronada por el Arcángel Rafael de las Minas de Pozo Ancho, o la de San Enrique de Alamillos Altos, de base octogonal (realizadas por Miguel Avi), ha resultado ser un poderoso atractivo tanto para turistas como para linarenses interesados en la cultura minera. Todo ello completado con los contenidos temáticos relacionados con la Mina-Fundición la Tortilla, recientemente declarada BIC (Bien de Interés Cultural), que los visitantes han podido contemplar en la vitrina expuesta por el Colectivo-Proyecto Arrayanes.
Se pueden destacar los días 26 y 27 como los de mayor afluencia debido a la llegada reciente de los turistas. Visitantes procedentes de otras poblaciones del distrito y de la provincia son los que han registrado un mayor porcentaje de asistencia, aunque este año ha destacado Córdoba por ser la provincia andaluza que más visitantes ofrece, tal vez debido a su cercanía y al pasado minero que comparte con Linares.
Como particularidad, especificar que más del 48,5% de los visitantes proceden de las diversas comunidades autónomas españolas, entre las que se encuentran el País Vasco, Aragón, Extremadura y las Islas Baleares. En este porcentaje total, hay que resaltar que un gran número de visitantes (casi un 30% del 48,5%) son procedentes de Cataluña, muchas de estas visitas se deben en su mayoría al nacimiento de estos visitantes en la ciudad de Linares. Además destacar otro gran número de personas procedentes de la Comunidad Valenciana y Madrid (6,73% y 4,04% respectivamente del 42%).
La otra gran mayoría de visitantes son procedentes del municipio. Un 36,70% del total son visitas realizadas por linarenses, que debido a las fiestas y a la visita de familiares que viven fuera deciden enseñarles la cultura de la ciudad.
La gran mayoría de ellos ha solicitado información relativa a la ciudad en general, al Conjunto Arqueológico de Cástulo y a nuestros senderos de pequeño recorrido por el patrimonio minero, mostrando el interés que nuestro particular y único paisaje minero despierta más allá de nuestras fronteras municipales.