La calzada de la parte baja de la calle Viriato, en el tramo entre Espronceda y la Plaza de San Francisco, ha visto modificada su ordenación de espacios al acortarse uno de los dos carriles de tráfico que existían, que ha sido en parte destinado a crear hasta cuatro nuevas plazas de estacionamiento.

Se da la circunstancia de que en la práctica, en especial a ciertas hora del día, era habitual que esos espacios estuvieran ocupados por vehículos a pesar de la prohibición que existía.