A las ocho de la mañana de ayer, estaba previsto que acudieran hasta el actual albergue de Arconatura, muy cerca del Cementerio Municpal, técnicos del Ministerio de Fomento para hacer las correspondientes mediciones de cara a la expropiación y posterior derribo de parte del mismo al verse la parcela afectada por las obras de la nueva autovía A-32. Finalmente los técnicos no aparecieron, pero sí se desplazaron hasta las puertas de estas instalaciones un nutrido grupo de voluntarios con idea de defender ese espacio hasta que se consiga un nuevo «hogar» para los cerca de 150 perros que se guardan dentro de la protectora.

El actual Secretario de Arconatura, Paco León, nos cuenta cuál ha sido el devenir de los acontecimientos y cuál es la situación actual ante el serio problema que se les plantea.

Voluntarios a las puertas del albergue