A los amantes, como yo, de la novela negra, nos es grato encontrar un nuevo autor con el que disfrutar de largas horas de intriga y emoción.

El autor gallego Domingo Villar, premiado en numerosas ocasiones y traducido ya a 6 idiomas, ha sido quien en estos últimos días me ha acompañado a través de la saga protagonizada por el detective Leo Caldas, de la que se han publicado 2 títulos: “Ojos de agua”, y “La playa de los ahogados” editadas en 2007 y 2009 respectivamente.

Dos novelas de intriga policial en la que la trama, bien estructurada, a la altura de Vázquez Montalbán o Lorenzo Silva, nos acercan a la vida social y cultural de Galicia, así como a la forma de ser esquiva e introvertida los gallegos, que contrasta, con mucho sentido del humor, con el carácter impulsivo Rafael Estévez, ayudante de Leo, un aragonés incapaz de comprender este entorno donde parece imposible encontrar una respuesta clara y directa a cualquier pregunta.

Novelas donde el paisaje, la lluvia o el mar toman protagonismo y nos sumergen tanto en ambientes elitistas y sofisticados (en Ojos de agua) como en los vericuetos de la vida cotidiana y marinera del pescador gallego (en La playa de los ahogados).

Relatos de fácil lectura, con personajes sencillos en la primera, pero mas profundos y complejos en la segunda, con paisajes y descripciones envolventes, y de las que me gustaría destacar la mirada irónica y divertida con la que el autor describe la personalidad de sus paisanos.