Linarense de nacimiento y castellonense de adopción. Pinto, simplemente porque no puedo dejar de hacerlo. Aparte de la necesidad de reflejar lo que me conmueve o me obsesiona -y hay ideas insistentes de verdad, que no te dejan en paz hasta que coges el pincel-, comprendo que personalmente voy creciendo, aprendiendo con cada nueva obra que termino. Es un camino apasionante que no sé a dónde me llevará, pero en el que avanzo paso a paso.
Me inspira la naturaleza… ¿Hay algo más bonito que la textura del tronco de un olivo?. Pero también me atraen irremediablemente las puertas y ventanas antiguas, atravesadas por marcas y cicatrices, cuentan historias de otros tiempos, otras tristezas, otros sueños… o los mismos de ahora.
Y no hay que olvidar la fantasía, sin ninguna explicación: peces que pueden conectar con flores o directamente transformarse en ellas, rostros que pueden ver algo que nadie más ve en una lluvia de piedras…
Si, además, al mostrar mis dibujos encontrara personas a las que también conmovieran, inspiraran y obsesionaran… ¿qué más podría pedir?
Inma G. Valderas
Increible, es una foto. El óxido de la reja bfff…