El «Aula Flamenca del Real Círculo de la Amistad de Córdoba», presentó el pasado día 11 de octubre, la «Asociación Cultural Flamenca muchoCANTE».

Fue un acto lleno de ilusión y esperanza hacia un futuro deseado del Arte Flamenco, pues son sus fines potenciar, difundir y respetar el flamenco en todas sus formas, fomentar el aprendizaje del cante en todos los niveles, un espacio donde se combinen la guitarra y el cante con un único fin, el de disfrutar del flamenco, un flamenco de puertas abiertas donde desde la tolerancia, todas las personas tienen cabida, uso terapéutico de este arte “todo aquel que canta su mal espanta».

Vistas estas premisas de sus objetivos, no tengo por más que recordar unos comentarios, que en su día publiqué en un medio de comunicación, en el que abogaba por la creación en Linares de un ente, donde la TARANTA fuese su objetivo. Un ente en el que se hablase, se estudiase y se difundiese este arte de Linares.

En él, el que yo en ese momento denomine como “Un Aula Flamenca” donde se estudiaría la historia, la literatura, el cante y el toque de guitarra, de este cante; así como la promoción de conferencias, coloquios y congresos; algo así, que fuese mas allá que un “simple” concurso nacional de tarantas anual, ya que entendía y entiendo, que Linares es algo más, su grandeza no debe de ser olvidada como sus minas, sus gentes y su cante, su hermoso arte esta poco reconocido.

He de manifestar mi siempre sincero reconocimiento a la labor que por el flamenco hacen las peñas flamencas de Linares. Su esfuerzo y como no, los costos que soportan para cubrir así las carencias de unas administraciones que, sí se apuntan a los beneficios políticos del PATRIMONIO CULTURAL, pero que “trasmiten” pocos de esos beneficios a la causa del flamenco, pues como digo, son las peñas las que realizan el máximo esfuerzo.

Sigo apostando por esa necesaria “Escuela” dedicada a la TARANTA, que Linares se merece donde las peñas sean algo más que unos simples convidados de piedra.

Retomando el acto cordobés, decir que fue un acto gratificante, pues vimos el esfuerzo de jóvenes por conocer el cante y la historia del arte flamenco, así como a personas de 74 años que después de su aciaga vida, algunos retornados desde otros puntos del país o desde el extranjero a su patria chica, se ponían a cantar, sin ánimo de destacar, solo con la ilusión de participar, subiéndose por primera vez a un escenario para decirle al mundo del flamenco que es posible, que ellos sí están dispuestos a darles el “Lustre” que este PATRIMONIO se merece. He de decir que las escuelas de cante, baile y guitarra, están dirigidas por ROSA DE LA MARÍA, que es a su vez la profesora de cante. Ella intervino en el acto final, deleitándonos con su arte, con un cante precioso y emotivo, pues como gran profesional que es, estuvo a la altura aun haciendo unos días que su madre había fallecido, pero eso, aun en su dolor, no le impidió ser lo que es, una gran artista y mejor profesional. Magnífica ROSA. Estuvo acompañada a la guitarra por el joven José Luís Antolí. El baezano, afincado en Córdoba, JUAN PÉREZ CUBILLO, profesor de literatura y gran aficionado, nos desgranó con su verbo fácil y su exquisito conocimiento del arte flamenco, la labor de esta naciente asociación, que aun presentada en ese mismo instante en sociedad, ya estaba dando sus frutos debido, claro está, a la callada labor que viene desarrollando ROSA DE LA MARÍA en diferentes peñas de Córdoba y asociaciones flamencas.

Y nada más, que no es poco, y no me refiero al comentario, no, sino al hecho que nos ocupa que es de una notable significación digno de elogio. QUE CUNDA EL EJEMPLO.

¡¡Que viva Linares, el flamenco y la Taranta!!